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martes, 27 de diciembre de 2011

El zeide samuel


 

 El ¹zeide Samuel es la imagen del abuelo por antonomasia. Describirlo es exactamente lo que nos imaginamos como el viejito bueno rodeado de nietos y cariño.
Tuve la suerte de disfrutarlo durante mis primeros 15 años de vida y me gustaría que mis nietos me recordasen aunque sea un poquito, como yo lo recuerdo a el.
Bajito, pelado, una mirada risueña, vestido mas como un ²nono italiano que un zeide judío- siempre vestía cuando estaba de entre casa el pantalón apretado por el cinturón pues le faltaba inevitablemente el último botón-
De risa contagiosa, cuando contaba un cuento casi no se lo entendía pues reía mas que hablaba- Se frotaba la cara con las manos y las bajaba acercándolas al que le escuchaba, como queriendo compartir su alegría-
Lo recuerdo levantándose temprano en la casa del pueblo cuando toda la familia estaba de vacaciones, lustrando los zapatos de todos ¡más de quince pares!
No se enojaba por nada del mundo y nos tenía una paciencia sin límites.
Con Gustavo mi primo, compramos pequeñas sandías por un peso cada una y se las vendimos a sus clientes de casa en casa a cinco, ¡Flor de venta! El zeide le devolvió la plata a todos para no pasar vergüenza (nos habían comprado pensando en las penurias que pasaba Don Samuel y su familia) .Nunca nos dijo nada para que disfrutáramos del gran negocio.
Era un gran tipo, hasta para morir fue muy campechano. En su último día de vida subió al sulky con que viajaba a las quintas para vender géneros a crédito y sintió un fuerte dolor en el costado.
No se le paso, cada vez mas fuerte, se bajo y se fue a recostar pidiéndole a mi abuela que llame al médico del pueblo.
El ³ tano Vicente, su vecino y amigo, percibió que algo no andaba bien y vino a interesarse.
Entró al dormitorio de los abuelos, se acercó a la vieja cama de bronce y con la mirada le pregunto a mi zeide que pasaba.
Mi abuelo le dijo:
-         ¡Esta vez me voy para la quinta del ñato!        
-                                                                                                                              Fueron sus últimas palabras...
Daniel Kritz


¹ Zeide: Abuelito en Yiddish (Lengua de los judíos de Europa)

² Nono: Abuelito en italiano coloquial.

³ Tano: Italiano en Lunfardo (Jerga rioplatense en sudamerica)

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